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Se modifica el sistema Antidumping

Decreto 33/2025 (PE) – Antidumping

Se modifica el sistema Antidumping

El Decreto 33/2025 representa una reforma significativa en el sistema de medidas antidumping de Argentina. Se publicó en el Boletín Oficial el 16/01/2025, buscando modernizar y agilizar los procesos de investigación y aplicación de derechos antidumping, con el objetivo de fomentar la competencia leal y proteger a la industria nacional.

¿Qué es el Antidumping?
Para poder comprender los detalles del decreto, es importante entender el concepto de dumping. El dumping ocurre cuando un producto se exporta a un país a un precio inferior al costo de producción o por debajo del precio de venta en el mercado de origen. Esta práctica comercial desleal puede perjudicar a las industrias nacionales, ya que los productos importados a precios artificialmente bajos pueden desplazar a los productos locales del mercado.

Principales cambios introducidos por el Decreto 33/2025: 
•    Limitación de la duración de las medidas antidumping: Una de las principales novedades del decreto es la imposición de un plazo máximo de 3 (tres) años para la aplicación de medidas antidumping, con posibilidad de una única prórroga de 2 (dos) años. Anteriormente, estas medidas podían renovarse indefinidamente.

•    Agilización de los procesos: Se establecieron plazos más cortos para las distintas etapas de las investigaciones antidumping, lo que permitirá obtener resultados de manera más expeditiva (plazo máximo: 8 meses).

•    Mayor transparencia: El decreto busca aumentar la transparencia de los procesos, facilitando el acceso a la información por parte de las partes interesadas.

•    Fortalecimiento de la defensa de la industria nacional: Se establecieron mecanismos más eficientes para la defensa de los intereses de la industria nacional frente a prácticas desleales de comercio internacional.

El decreto tiene importantes implicancias tanto para las empresas importadoras como para las industrias nacionales. Por un lado, las empresas importadoras deberán adaptarse a los nuevos plazos y requisitos para poder seguir comercializando sus productos en Argentina y por otro, las industrias nacionales se verán beneficiadas por una mayor protección frente a prácticas desleales de comercio internacional.

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